Estudiantes de Educación Parvularia visitan Huerta-Escuela del Museo de la Educación Gabriela Mistral

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10 / 10 / 2018

En el marco del curso “Integración de la Enseñanza Natural y Social en Educación Parvularia”, de las profesoras Sulvy Cáceres, Camila Contreras y Camila Silva.

El lunes 8 de octubre, estudiantes del curso “Integración de la Enseñanza Natural y Social en Educación Parvularia”, ofrecido por las profesoras Sulvy Cáceres, Camila Contreras y Camila Silva, visitaron la Huerta-Escuela ubicada en las inmediaciones del Museo de la Educación Gabriela Mistral, en las proximidades de la Quinta Normal. Esta visita fue parte de una unidad pedagógica orientada a que las estudiantes conozcan en terreno distintos modelos de integración de saberes en la educación parvularia. En esta ocasión, el tema fue la Educación Patrimonial.

De acuerdo a la profesora Camila Silva, “la educación patrimonial permite que las comunidades educativas valoren los saberes de miembros de la comunidad que no necesariamente son docentes o profesionales, pero que poseen conocimientos muy valiosos para la comprensión del mundo social y natural”. En el caso del Museo de la Educación Gabriela Mistral, “se ofrece una Huerta-Escuela inspirada en el trabajo de Gabriela Mistral, que permite conectar a una figura emblemática de la educación chilena con una práctica tradicional como la creación de huertas y jardines en las propias casas, muchas veces mantenidas por las mamás, los abuelos; y al mismo tiempo, ofrecer una oportunidad de descubrir el mundo natural y generar acciones concretas para el cuidado del medioambiente”, señaló la docente.

Según la estudiante Macarena Oro, la oportunidad educativa que ofrece este lugar es que “cuenta con áreas y espacios donde los niños y niñas puedan trabajar en talleres, generando invitaciones libres a vecinos y escuelas cercanas a trabajar de este proyecto. El huerto educativo busca que niños y niñas puedan trabajar, interactuar y construir aprendizajes a partir del trabajo en la tierra, por lo que participan en actividades de siembra, limpieza de cultivos y desarrollo de técnicas de cultivo, como las bombas de semillas. Así se fortalecen los lazos de colaboración y participación con la comunidad aledaña al museo por lo que se presenta como un proyecto social de participación ciudadana”.

En la ocasión las educadoras de párvulos en formación pudieron reflexionar sobre la importancia de generar estrategias didácticas que permitan que las niñas y los niños participen activamente en la solución de las problemáticas sociales. De acuerdo a Macarena Oro, el Museo de la Educación permite el desarrollo de la “ciudadanía planetaria”, noción del filósofo Edgar Morin “que permite comprender al ser humano y al medio ambiente como dos factores permanentemente relacionados entre sí, donde cada uno tiene el poder y la facultad de incluir en el otro. Esta perspectiva permite a niños y niñas comprender el mundo como un todo integral, el cual está relacionado y estrechamente ligado entre sí. Permitiendo así la conformación de personas críticas, conscientes, reflexivas y respetuosas del mundo que los rodea, entendiendo que al cuidar el medio ambiente están cuidándose a sí mismos”.

Durante esta semana, otro grupo de estudiantes visitará el Museo de Arte Precolombino, y en las próximas clases seguirán conociendo otros enfoques, como la educación intercultural y la educación ambiental.

Texto y fotos: Camila Silva.